El lenguaje ha sido, es y será una herramienta esencial en todos los aspectos de nuestra vida, tanto como los sociales, los familiares, así como los particulares o los individuales. Siempre existirá esta relación y esta urgencia de comunicarnos con otros para satisfacer nuestras necesidades.
Existen muchas teorías acerca del origen del lenguaje en nuestra humanidad, pero son solo eso, teorías y nada más, pues no se ha proporcionado evidencia clara de que haya tenido un origen determinado, y por lo tanto muchos investigadores solo han recreado situaciones que puede que hayan servido para dar origen al lenguaje. Esto representa un gran vacío en el transcurso de nuestra vida y nuestra historia, pues muchos investigadores de distintas corrientes han planteado distintas hipótesis al respecto, algunas más convincentes que otras, aquí te presento algunas de ellas.
Tenemos la hipótesis del origen divino, la cual afirma que Dios creó a Adán, “y formó del suelo a los animales del campo y a las aves del cielo y los llevo ante el hombre para que cada ser viviente tuviese el nombre que él le diera” (Génesis, 2.19).
Según la tradición hindú, el lenguaje viene de la diosa Sarasvati, esposa de Brahma, creador del universo. En casi todas las religiones hay una fuente divina que dota a los humanos del don del lenguaje. A lo largo de la historia se han llevado a cabo diversos experimentos con resultados no poco polémicos, en un intento de redescubrir esa lengua original. La hipótesis básica sugería que, si se permitía que algunos niños crecieran sin entrar en contacto con una lengua, usarían la lengua dada por Dios.
La hipótesis del sonido natural
Esta hipótesis sugiere que el habla está basada en sonidos naturales, la idea del origen de las palabras primitivas afirma que éstas se basan en imitaciones de los sonidos que hombres y mujeres primitivos oían. Si escuchaban un ave volar, imitaban el sonido que ésta emitía con el aleteo, otros hacían cucú, y por lo tanto estos sonidos eran adoptados para referirse a esos animales. En algunos casos, esas palabras existen aún en nuestros días, por ejemplo, el perro hace guau-guau, en castellano; en inglés hace, woof-woof. entre otras.
Otras hipótesis sugieren que el habla proviene de gritos de emociones como el dolor, el enfado o la alegría, etc. De esta forma se supone que la expresión, ¡ay! Posee connotaciones relacionadas con el dolor. Otras interjecciones a menudo representadas con: ¡Huy! ¡Ah! ¡Oh! ¡Au! Todas ellas en realidad no se pronuncian con las consonantes o las vocales con las que se escriben, sino que se producen con inspiraciones repentinas.
La adaptación fisiológica
Esta teoría propone que una fase inicial de la evolución de nuestros antepasados se llevó a cabo hace miles de años, lo cual se refiere al cambio de una postura cuadrúpeda a una postura erguida, lo que permitió una locomoción bípeda, lo cual dio lugar a un reajuste de funciones de las extremidades anteriores.
Algunos de estos cambios pueden observarse entre las diferencias físicas que existen entre el esqueleto de un gorila y el de un hombre de Neanderthal, que sugiere que habría sido capaz de reproducir algunos sonidos distintivos similares al del humano moderno.
Los dientes adoptaron una posición recta, ya no estaban inclinados hacia adelante y contaban con el tamaño preciso para masticar la comida. Los labios humanos están más conectados a la boca, lo cual permite elaborar cientos de sonidos. La boca humana es más pequeña en comparación de los primates, puede abrirse y cerrarse rápidamente. La laringe humana se diferencia notablemente por su posición , la cual es erecta, e hizo que la cabeza se adelantara con relación a la columna vertebral.
Estas son algunas de las teorías que existen para explicar el origen del lenguaje, y mientras los científicos e investigadores siguen haciendo su trabajo, nosotros continuaremos informando sus avances.
Bibliografía
El Lenguaje, George Yule, 1988.